martes, 15 de noviembre de 2011

QUIEN NO TE CONOZCA QUE TE COMPRE (Cuentos y chascarrillos andaluces)

QUIEN NO TE CONOZCA QUE TE COMPRE
(Cuentos y chascarrillos andaluces)



No nos atrevemos a asegurarlo, pero nos parece y querernos suponer que el tío Cándido fue natural y vecino de la ciudad de Carmona.

Tal vez el cura que le bautizó no le dio el nombre de Cándido en la pila, sino que después todos cuantos le conocían y trataban le llamaron Cándido porque lo era en extremo. En todos los cuatro reinos de Andalucía no era posible hallar sujeto más inocente y sencillote.

El tío Cándido tenía además muy buena pasta.

Era generoso, caritativo y afable con todo el mundo. Como había heredado de su padre una haza, algunas aranzadas de olivar y una casita en el pueblo, y como no tenía hijos, aunque estaba casado, vivía con cierto desahogo.

Con la buena vida que se daba se había puesto muy lucio y muy gordo.

Solía ir a ver su olivar, caballero en un hermosísimo burro que poseía; pero el tío Cándido era muy bueno, pesaba mucho, no quería fatigar demasiado al burro y gustaba de hacer ejercicio para no engordar más. Así es que había tomado la costumbre de hacer a pie parte del camino, llevando el burro detrás asido del cabestro.

Ciertos estudiantes sopistas le vieron pasar un día en aquella disposición, o sea a pie, cuando iba ya de vuelta para su pueblo.

Iba el tío Cándido tan distraído que no reparó en los estudiantes.

Uno de ellos, que le conocía de vista y de nombre y sabía sus cualidades, informó de ellas a sus compañeros y los excitó a que hiciesen al tío Cándido una burla.

El más travieso de los estudiantes imaginó entonces que la mejor y la más provechosa sería la de hurtarle el borrico. Aprobaron y hasta aplaudieron los otros, y puestos todos de acuerdo, se llegaron dos en gran silencio, aprovechándose de la profunda distracción del tío Cándido, y desprendieron el cabestro de la jáquima. Uno de los estudiantes se llevó el burro, y el otro estudiante, que se distinguía por su notable desvergüenza y frescura, siguió al tío Cándido con el cabestro asido en la mano.

Cuando desaparecieron con el burro los otros estudiantes, el que se había quedado asido al cabestro tiró de él con suavidad. Volvió el tío Cándido la cara y se quedó pasmado al ver que en lugar de llevar el burro llevaba del diestro a un estudiante.

Éste dio un profundo suspiro, y exclamó:

-Alabado sea el Todopoderoso.

Por siempre bendito y alabado, -dijo el tío Cándido.

Y el estudiante prosiguió:

-Perdóneme usted, tío Cándido, el enorme perjuicio que sin querer le causo. Yo era un estudiante pendenciero, jugador, aficionado a mujeres y muy desaplicado. No adelantaba nada. Cada día estudiaba menos. Enojadísimo mi padre me maldijo, diciéndome: eres un asno y debieras convertirte en asno.

Dicho y hecho. No bien mi padre pronunció la tremenda maldición, me puse en cuatro pies sin poderlo remediar y sentí que me salía rabo y que se me alargaban las orejas. Cuatro años he vivido con forma condición asnales, hasta que mi padre, arrepentido de su dureza, ha intercedido con Dios por mí, y en este mismo momento, gracias sean dadas a su Divina Majestad, acabo de recobrar mi figura y condición de hombre.

Mucho se maravilló el tío Cándido de aquella historia, pero se compadeció del estudiante, le perdonó el daño causado y le dijo que se fuese a escape a presentarse a su padre y a reconciliarse con él.

No se hizo de rogar el estudiante, y se largó más que deprisa, despidiéndose del tío Cándido con lágrimas en los ojos y tratando de besarle la mano por la merced que le había hecho.

Contentísimo el tío Cándido de su obra de caridad se volvió a su casa sin burro, pero no quiso decir lo que le había sucedido porque el estudiante le rogó que guardase el secreto, afirmando que si se divulgaba que él había sido burro lo volvería a ser o seguiría diciendo la gente que lo era, lo cual le perjudicaría mucho, y tal vez impediría que llegase a tomar la borla de Doctor, como era su propósito.

Pasó algún tiempo y vino el de la feria de Mairena.

El tío Cándido fue a la feria con el intento de comprar otro burro.

Se acercó a él un gitano, le dijo que tenía un burro que vender y le llevó para que le viera.

Qué asombro no sería el del tío Cándido cuando reconoció en el burro que quería venderle el gitano al mismísimo que había sido suyo y que se había convertido en estudiante. Entonces dijo el tío Cándido para sí:

-Sin duda que este desventurado, en vez de aplicarse, ha vuelto a sus pasadas travesuras, su padre le ha echado de nuevo la maldición y cátale allí burro por segunda vez.

Luego, acercándose al burro y hablándole muy quedito a la oreja, pronunció estas palabras, que han quedado como refrán:

-Quien no te conozca que te compre.


http://albalearning.com/audiolibros/valera_quiennoteconozca.html

Juan Valera

viernes, 11 de noviembre de 2011

«¡Ya verás cuando vayas a la escuela!»

«¡Ya verás cuando vayas a la escuela!»

Dos de mis tíos, como muchos otros jóvenes, habían emigrado a América para no ir de quintos a la guerra de Marruecos. Pues bien, yo también soñaba con ir a América para no ir a la escuela. De hecho, había historias de niños que huían al monte para evitar aquel suplicio. Aparecían a los dos o tres días, ateridos y sin habla, como desertores del Barranco del Lobo.

Yo iba para seis años y todos me llamaban Pardal. Otros niños de mi edad ya trabajaban. Pero mi padre era sastre y no tenía tierras ni ganado. Prefería verme lejos que no enredando en el pequeño taller de costura. Así pasaba gran parte del día correteando por la Alameda, y fue Cordeiro, el recogedor de basura y hojas secas, el que me puso el apodo: «Pareces un pardal*».

Creo que nunca he corrido tanto como aquel verano anterior a mi ingreso en la escuela. Corría como un loco y a veces sobrepasaba el límite de la Alameda y seguía lejos, con la mirada puesta en la cima del monte Sinaí, con la ilusión de que algún día me saldrían alas y podría llegar a Buenos Aires. Pero jamás sobrepasé aquella montaña mágica.

«i Ya verás cuando vayas a la escuela»

Mi padre contaba como un tormento, como si le arrancaran las amígdalas con la mano, la forma en que el maestro les arrancaba la jeada del habla, para que no dijesen ajua un ni jato ni jracias. «Todas las mañanas teníamos que decir la frase Los pájaros de Guadalajara tienen la garganta llena de trigo**. ¡Muchos palos llevamos por culpa de Juadalagara!» Si de verdad me quería meter miedo, lo consiguió. La noche de la víspera no dormí. Encogido en la cama, escuchaba el reloj de pared en la sala con la

*En gallego, gorrión. (N. de la T.)
**En castellano en el original.

Manuel Rivas
La lengua de las mariposas

Verdad de verdad si pinocho nos dijo

Poesía   
Edgar Allan García
 
                           Verdad de verdad                                    
                            si pinocho nos dijo
                                 la verdad
                           peter pan era mayor
                                  de edad 
                          no fue el loco mambrú
                                a la guerra
                       ni el famoso aladino entró 
                                 a la cueva 
                         era un perro con botas
                                   no gato
                         y era feo el gran buitre
                                 no el pato 
                          el zapatito de cristal
                                 se rompió
                        y con la bruja el príncipe
                                   se casó 
                          el lobo feliz era amigo
                                de la abuela
                            y la tal caperucita
                                una locuela 
                           la bella fue la bestia
                                 del cuento
                          y la que tanto dormía
                               un esperpento 
                         ¿blanca como la nieve?
                                linda mulata
                           ¿y el príncipe azul?
                               toda una lata 
                      soplaron los tres chanchitos 
                         para derribar mi versión
                  y este problema... digo, este poema 
                               a su fin llegó.

 

sábado, 5 de noviembre de 2011

La jirafa Rafa

La jirafa Rafa tenía la cabeza en las nubes, ignorante del ruiseñor que se le acercaba. Estaba probando las últimas hojas de las ramas más altas de una encina centenaria cuando el ruiseñor Señor se posó en una de las ramitas que estaba a punto de tragarse, muy cerca de sus orejas, y la saludó así:

-¡Tú, jirafa Rafa!
Abre las orejas
que no quiero quejas
si sólo oyes rejas
en vez de oír orejas.
porque tú te dejas
medias palabrejas
y desemparejas
todas las madejas
y dejas perplejas
hasta a las conejas
que comen lentejas...
¡Tú, jirafa Rafa!
¿Sabes que mi amiga,
que es la hormiga Miga,
no ve lo diverso
que es el universo?

La jirafa Rafa movió las orejas, miró con sorpresa al ruiseñor y respondió:

-¡Qué bien hablas en verso!

-Mi amiga es tan bajita
que, pobre, necesita
subir a lo más alto
sin ningún sobresalto.

-¿Podrá subir tan alto?

-No tiene más remedio.

-¿Dices que tiene un medio?

-Me ha pedido un amigo
que la suba conmigo
y, más que pedir, reza
estar en tu cabeza.

Es tan leve su peso
que será como un beso
.
-¡Uy, qué bien! ¡Eso, eso...!

-¿Entonces qué le digo?

¿Puede subir conmigo?

A ver si lo consigo
.
¿Puedo contar contigo?

-Me importa más que un higo.
-¿Tú lo ves bien así?
-Ya te he dicho que sí.

Y con el sí de la jirafa, salió el ruiseñor volando hacia el suelo, donde lo esperaban ansiosos la hormiga Miga y sus amigos.

Emili Teixidor
El Barco de vapor
SM

Mi padre y yo nos fuimos al zoo.

-Bueno -le dijo el cajero a mi padre-, usted mismo también es una atracción.

-Sí -dijo mi padre.

Mi padre es tan alto como la jirafa más alta. Allí es donde fuimos primero.

Él se puso cerca de la valla.

-¡Hola, jirafas! -exclamó.

Ellas se le acercaron y le miraron con grandes ojos.

« ¡Qué jirafa más rara!», pensaron. Eso era evidente. «No tiene ninguna mancha, ni cuernecillos, ni el cuello largo, ni pezuñas, y a pesar de todo eso es una jirafa...»

Pero mi padre no es en absoluto una jirafa. Mi padre es una persona.

Una persona muy alta. Y él es sobre todo, por encima de todo, y en primer lugar, mi padre.

Vimos muchos animales. No voy a contar nada más sobre ellos, porque todo el mundo los conoce.

Pero, cuando ya casi íbamos a volver a casa, oímos un enorme griterío.

La gente corría en todas direcciones.

-¡Un elefante! -gritaban-. ¡Un elefante!

Un gran elefante gris venía corriendo hacia nosotros. Yo estaba detrás de mi padre, en medio del camino. Todos los visitantes habían desaparecido entre los arbustos o habían trepado rápidamente a los árboles.

Mi padre se quedó inmóvil. El elefante corría, barritaba, sacudía las orejas y parecía que iba a chocarse contra mi padre. Pero, cuando estaba cerca de él, preparó sus patas, frenó y se quedó quieto.
Tenía los ojos cerca de los de mi padre. Yo miré hacia arriba desde detrás de su rodilla.

-Bien... elefante -dijo mi padre-: ¡Hay que ver qué prisa tienes de repente!

El elefante no contestó, por supuesto. Podría haberme inventado algo, pero no lo voy a hacer.

-¿Acaso te ibas a África? ¿Querías irte a casa? -le preguntó mi padre-. Bueno, lo podría comprender... andar entre la alta hierba... beber en el río... morder la corteza de los árboles... dormir con otros diez o veinte a la vez...

A mí también me pareció muy triste de pronto que el elefante estuviera siempre tras una cerca.

Y entonces dijo mi padre (y yo siempre, siempre querré a mi padre después de aquel día):

-¡Acompáñame!

Cogió al elefante por la trompa y salieron así del zoológico. Nadie se atrevió a aparecer. El cajero, aquel que había dicho que mi padre era una atracción, se quedó temblando un poco después entre las pesetas y los cinco duros; no se le podía ver, pero sí oí el tintineo.

Yo caminaba detrás del elefante, le cogía por el rabo.

De esta forma íbamos por la calle a la salida del zoo. La gente se apartaba cambiando de dirección, los coches se metían en bocacalles o se subían a las aceras. Teníamos la carretera para nosotros solos.

Nos fuimos andando hasta el aeropuerto. Allí nos metimos en un pequeño avión. El elefante se quedó en una especie de bodega. Yo me senté en una butaca, mi padre en otra que estaba tras la palanca de mando. Despegó y volamos directamente a África.

Aterrizamos en alguna parte entre la alta hierba. Hacía mucho calor.

Mi padre abrió la puerta del avión.

-Bien, elefante -dijo él-: Hemos llegado.

Había arbustos y árboles chatos con espinas, y fluía un río.

El elefante salió del avión, guiñó un ojo y se quedó parado un momento.

Luego dio un mordisco a la hierba, y un poco después otro a una corteza. Barritaba. Y en la lejanía contestaron barritando. Levantó las orejas y la trompa y se marchó corriendo sin mirar atrás ni una sola vez.

Volvimos volando a casa.

El avión olía a elefante y mis manos también. Incluso cuando ya estábamos en casa. Era un olor muy especial. Olor a elefante. Yo lo volvía a aspirar una y otra vez.

Toon Tellegen
Mi padre

TEXTOS POSIBLES



Cuentos infantiles Había una vez una gallina roja llamada Marcelina

Cuentos infantiles
Había una vez una gallina roja llamada Marcelina, que vivía en una granja rodeada de muchos animales. Era una granja muy grande, en medio del campo. En el establo vivían las vacas y los caballos; los cerdos tenían su propia cochiquera. Había hasta un estanque con patos y un corral con muchas gallinas. Había en la granja también una familia de granjeros que cuidaba de todos los animales.
Un día la gallinita roja, escarbando en la tierra de la granja, encontró un grano de trigo. Pensó que si lo sembraba crecería y después podría hacer pan para ella y todos sus amigos.
-¿Quién me ayudará a sembrar el trigo? les preguntó.
- Yo no, dijo el pato.
- Yo no, dijo el gato.
- Yo no, dijo el perro.
- Muy bien, pues lo sembraré yo, dijo la gallinita.

Y así, Marcelina sembró sola su grano de trigo con mucho cuidado. Abrió un agujerito en la tierra y lo tapó. Pasó algún tiempo y al cabo el trigo creció y maduró, convirtiéndose en una bonita planta.
-¿Quién me ayudará a segar el trigo? preguntó la gallinita roja.
- Yo no, dijo el pato.
- Yo no, dijo el gato.
- Yo no, dijo el perro.
- Muy bien, si no me queréis ayudar, lo segaré yo, exclamó Marcelina.

Y la gallina, con mucho esfuerzo, segó ella sola el trigo. Tuvo que cortar con su piquito uno a uno todos los tallos. Cuando acabó, habló muy cansada a sus compañeros:
-¿Quién me ayudará a trillar el trigo?
- Yo no, dijo el pato.
- Yo no, dijo el gato.
- Yo no, dijo el perro.
- Muy bien, lo trillaré yo.

Estaba muy enfadada con los otros animales, así que se puso ella sola a trillarlo. Lo trituró con paciencia hasta que consiguió separar el grano de la paja. Cuando acabó, volvió a preguntar:
-¿Quién me ayudará a llevar el trigo al molino para convertirlo en harina?
- Yo no, dijo el pato.
- Yo no, dijo el gato.
- Yo no, dijo el perro.
- Muy bien, lo llevaré y lo amasaré yo, contestó Marcelina.

Y con la harina hizo una hermosa y jugosa barra de pan. Cuando la tuvo terminada, muy tranquilamente preguntó:
- Y ahora, ¿quién comerá la barra de pan? volvió a preguntar la gallinita roja.
-¡Yo, yo! dijo el pato.
-¡Yo, yo! dijo el gato.
-¡Yo, yo! dijo el perro.
-¡Pues NO os la comeréis ninguno de vosotros! contestó Marcelina. Me la comeré yo, con todos mis hijos. Y así lo hizo. Llamó a sus pollitos y la compartió con ellos

domingo, 30 de octubre de 2011

Dichos y frases hechas.

Hay un grupo de sentencias que no pueden (o no suelen) considerarse propiamente refranes. Es el territorio, tan fértil como difícil de acotar, de las frases hechas: maneras y modismos que suelen salir tal cual de la boca de uno, invariables; verdaderos fósiles lingüísticos en cuya sintaxis imposible el curioso encontrará a menudo preciosas metáforas lexicalizadas. Algunas, las más próximas a los refranes, constituyen un enunciado completo, nominal o verbal; otras son más bien locuciones verbales o adverbiales que se insertan tal cual en mitad de una frase.

2. Dichos y frases hechas.


A bocajarro
A bote pronto.
A buenas horas, mangas verdes.
A calzón quitado.
A cara de perro.
A ciegas.
A Dios gracias.
A enemigo que huye, puente de plata.
A escondidas.
A este paso, monto un circo y me crecen los enanos.
A esto y a las tabas, se murió el que me ganaba.
A falta de pan, buenas son tortas.
A grandes males, grandes remedios.
A humo de pajas.
A hurtadillas.
A la chita callando.
A la ligera.
A la pata la llana.
A la tercera va la vencida.
A la tremenda.
A la vejez, viruelas.
A las duras y a las maduras.
A las primeras de cambio.
A lo loco.
A medio gas.
A morir por Dios.
A nadie le amarga un dulce.
A ojo de buen cubero.
A pelo.
A pies juntillas.
A quemarropa.
A rey muerto, rey puesto.
A río revuelto, ganancia de pescadores.
A todo se hace uno.
A tontas y a locas.
A trancas y barrancas.
A tumba abierta.
A vivir, que son dos días.
Ábrase como las vacas de Pie de Cuesta.
Dicho colombiano: las vacas de Pie de Cuesta andan a menudo sueltas por las calles y molestan a los transeúntes. Quiere decir: quítate de en medio, que estorbas.
Abrirse de un sitio.
Acabar como el rosario de la aurora.
Agachar las orejas.
Agarrarse a un clavo ardiendo.
Agárrate que vienen curvas.
Agua corriente no mata a la gente.
Agua que no has de beber, déjala correr.
Ahogarse en un vaso de agua.
Ajo y agua [y resina].
A joderse, aguantarse y resignarse.
Al buen tuntún.
Al enemigo, ni agua.
Al mal tiempo, buena cara.
Al pie de la letra.
Amor a primera vista.
Andando, que es gerundio.
Andar a la greña.
Estar a la greña.
Andar a salto de mata.
Andar como Pedro por su casa.
Andar como perro de rico.
Andar con la soga al cuello.
Andar pisando huevos.
Andarse con chiquitas.
Andarse con rodeos.
Andarse por las ramas.
Ante la duda, la más tetuda.
Apaga y vámonos.
Aprendiz de todo, maestro de nada.
Aprobar por los pelos.
Apuntarse a un bombardeo.
Aquellos polvos trajeron estos lodos.
Aquí hay gato encerrado.
Aquí te pillo, aquí te mato.
Armar la de Dios [es Cristo].
Armar la de San Quintín.
Armar la marimorena.
Armar la tremolina.
Armar una buena.
Armar una de las gordas.
Armarse un taco con algo.
Arreglárselas [muy] bien.
Arriba los corazones.
Arrimar el hombro.
Arroz pegao.

Ø Se dice de los que bailan juntitos a media luz.
Atarse los machos.http://www.blogger.com/img/blank.gif
Aún hay clases.
Bailar con la más fea.
Bajada de pantalones.
Bajar la guardia.
Bajarse del pedestal.
Bajo cuerda.



http://iesaugustobriga.juntaextremadura.net/memoria/Dichos.htm

lunes, 12 de septiembre de 2011

REFRANERO CLIMÁTICO DEL MES DE SEPTIEMBRE

http://www.infojardin.com/foro/showthread.php?t=9361
http://www.blogger.com/img/blank.gif
Septiembre supone una transición entre dos estaciones astronómicas: el Verano que se retira y el Invierno que avanza. Siguen acortando los días; por eso se dice que el otoño es una especie de Primavera al revés: crecen las noches y menguan los días y se pasa progresivamente del calor al frío.
Hacia mediados de mes, si el verano fue caluroso y seco, puede hacer su aparición el primer temporal formal de lluvias con viento del Noroeste y entrada de aire mas frío. A lo largo de Septiembre suelen ser también frecuente las tormentas por amplias regiones.
En el campo se ven bandas de perdices igualonas, en los barbechos saltan las liebres, se recoge la miel de las colmenas y se generaliza la vendimia.
Por sus tormentas, granizadas y diluvios este mes tiene mal fama en el campo, igual que la tiene abril por sus heladas tardías y sus retrocesos al frío.
A finales de mes las temperaturas se recuperan y hay tiempo soleado y estable: "Veranillo de los Arcángeles".
A continuación comentaremos algunos refranes relativos al mes:
1) ''Septiembre es bueno si de primeros al final pasa sereno; si no Septiembre se tiemble''
Es un mes muy arbitrario en su comportamiento, ya que puede prolongar el calor del estío o traer intensas tormentas e inundaciones.
2) "Del mes que entra con abad y sale con fraile, Dios nos guarde"
El día 1 es San Gil y el día 30 San Jerónimo. Entre medias puede haber tiempo estable en ocasiones, y en otras enormes tormentas, diluvios y riadas.
3) "Marzo y Septiembre son cual hermanos: uno dice adiós al Invierno y otro al Verano"
Astronómicamente, el día 21 de Marzo comienza la Primavera (Sol en Aries) y en Septiembre el día 23 comienza el OTOÑO (Sol en Libra).Los cambios de tiempo se sintetizan en el refrán:
“ Septiembre y Marzo, ventoleros ambos”
4) "Septiembre es frutero, alegre y festero"
Alude a la recogida de los últimos frutos: melón, melocotón, uvas, higos ... También a Ias grandes fiestas que se organizaban en los pueblos, una vez terminadas las eras y encerradas las cosechas. Estos festejos han llegado a nuestros días con bailes, bandas de música, corridas de toros y otras algazaras.
5) "Cuando la Virgen llega, la golondrina se va"
- Relativo al Nacimiento de Nª Sª ( día 8 de Septiembre), época en que las tormentas comienzan a refrescar el ambiente y las golondrinas comienzan su emigración hacia África, formando grandes bandadas.
6) "Por San Mateo, tanto veo come no veo"
La festividad del Evangelista es el día 21 y el equinoccio es el día 23, con igual duración del día y la noche. Referido a la hora solar a las 6 de la mañana amanece y a las 6 de la tarde anochece. Otro refrán rural es el siguiente: "Si llueve por San Mateo, puercas vendimias y gordos borregos".
7) "Por el veranillo de San Miguel están los frutos como la miel"
San Miquel es el día 29 de Septiembre, en la actualidad es la festividad de los Arcángeles: San Miguel San Gabriel - San Rafael. Suele ser un periodo soleado que coincide con los últimos calores estivales. Las frutas están en su punto optimo de maduración.
8) "Septiembre se tiemble, pues o seca las fuentes o se lleva los puentes"
Esto es muy específico en Ias costas del Mediterráneo, donde después de una larga sequía hay enormes diluvios, grandes riadas y catastróficas avenidas, corriendo el agua por ramblas, rieras y torrenteras.
9) "Septiembre benigno, Octubre florido"
- Alude al veranillo de la última decena en las que el ambiente soleado hace recuperarse a las temperaturas. Por parques y jardines aparecen las rosas otoñales. Otro refrán dictamina: "En Septiembre a fin de mes, el calor vuelve otra vez”.
10) "Si en Septiembre comienza a llover, Otoño seguro es"
Los temporales generalizados de lluvia mojan los suelos, suavizan el ambiente y preparan las tierras para la sementera. También se refuerza la corriente de los ríos y se pone fin al estiaje.
Con estas sentencias populares damos por terminados los comentarios de Refranero y Santoral del mes de Septiembre

Un saludo.

sábado, 7 de mayo de 2011

domingo, 20 de febrero de 2011

Algunos juegos romanos que te divertirían

Los juegos de los niños romanos eran bastante parecidos a los tuyos, sólo que a veces eran muy depravados.

Trigón

La próxima vez que tus padres sacrifiquen un cerdo para comer, les pides que te den la vejiga. De todas formas es una parte que no se come. La vejiga se lava, se hincha como un globo y se ata.

Se dibuja en el suelo un triángulo con lados de dos metros y un jugador se sitúa en cada esquina del triángulo.

La vejiga (pelota) se pasa de un jugador a otro sin que toque el suelo.

El juego consiste en mantener la pelota en el aire el mayor tiempo posible.

¿Fácil? Entonces añade dos pelotas más de modo que cada jugador tenga la suya. No hay ningún orden para pasar la pelota. Puedes pasarla mientras recibes las otras dos de los otros jugadores. (Sugerencia: es útil tener tres manos.)

Si dejas caer la pelota pierdes un punto. El ganador es el que menos veces ha dejado caer la pelota durante cierto período de tiempo, pongamos cinco minutos. (Si no logras encontrar un cerdo muerto, utiliza pelotas de tenis.)

Tabas

Si por casualidad tus padres sacrifican una oveja para ofrecerla a los dioses, pídeles que te den una de sus patas.

Hiérbela hasta que la carne y la piel se separen de los huesos.
Coge los pequeños huesos cúbicos y sécalos. Ahora tienes cinco «dados».
Recógelos en una mano y lánzalos al aire. El juego consiste en ver cuántos puedes recoger con el dorso de tu mano.
(Nota: Si tus padres no van a sacrificar ninguna oveja esta semana, puedes utilizar piedras, dados o cubitos de madera.)

Pares o nones

Se juega por parejas.
Cada jugador coloca la mano detrás de su espalda.
Se elige una señal, por ejemplo uno de los jugadores inclina la cabeza.
Cuando se hace la señal, ambos jugadores sacan la mano derecha con un número de dedos extendidos.
Al mismo tiempo, cada jugador canta el número total de dedos que cree que habrá.
Si ninguno de los dos lo adivina, se repite.
El ganador es el que acierta primero.
(Nota: Parece sencillo. En realidad, cuanto más se juega, más se aprende a utilizar tácticas inteligentes. Pruébalo y verás.)


Juego del uno

Se escoge a alguien para que «pare».

Se sienta en el suelo y se dice que está en el «saco». Los otros intentan tocarle con la punta del dedo o pellizcarle. Los depravados niños romanos eran muy crueles cuando jugaban a esto.

(Advertencia: ¡Sólo pincha o pega si el que «para» es un profesor!)

El que está en el suelo no puede levantarse, pero sí agarrar a uno de los que le tocan.

El que es agarrado por el que «para» ocupa su lugar.

La gallina ciega

Se elige a alguien y se le vendan los ojos.

Los otros jugadores danzan alrededor tocando al «ciego» con un palo y gritando: « ¡Ven a cogerme!», cosa que la persona con los ojos vendados intenta hacer.

Si uno de los jugadores es atrapado, el ciego intenta adivinar quién es.

Si acierta, entonces el que ha atrapado se convierte en el ciego.

Nueces

Cada jugador tiene una cierta cantidad de nueces.

Cada jugador añade una nuez de su montón para formar una pirámide.

El ganador es el jugador que coloca más nueces antes de que se derrumbe la pirámide.


Juegos de palabras

Si te gustan los juegos de palabras o crucigramas, es posible que te guste hacer un «cuadrado» de palabras que pueda leerse lo mismo de derecha a izquierda o de arriba abajo.

Aquí tienes un ejemplo que fue hallado en la Britania romana (en Berkshire). Lo encontraron grabado en un azulejo.

SATOR
AREPO
TENET
OPERA
ROTAS


Sator significa «sembrador». Arepo es un nombre masculino. Tenet es un tiempo del verbo latino tenere (tener). Opera significa «trabajo» u «obra». Rotas significa «ruedas». El cuadro también ha sido traducido así: «Arepo, el sembrador, cuida de las ruedas».

PERO alguna persona inteligente averiguó que no se trata de un juego de palabras, sino de una secreta oración cristiana. Con todas las letras podrás formar la palabra PATERNOSTER. En latín significa Padre Nuestro, el principio de la oración que nos enseñó Jesús. Sobran dos «aes» y dos «oes». Para los primeros cristianos, estas letras representaban «el principio y el fin».

¿Inteligente, no? ¿Una mera coincidencia? ¿0 es realmente una oración? Escoge tu propia opinión.

ESOS DEPRAVADOS ROMANOS
ED MOLINO


*En Febrero, el loco, ningún día se parece a otro.

*El Sol en Febrero, saca el lagarto del agujero.

*En Febrero,ya tiene flor el almendro.

*Febrerillo,malo o bueno, siempre resulta embustero.

*La Flor de Febrero no va al frutero.

*Si tgruena en Febrero,mal aguero.

*Agua de Febrero, llena el granero.

*Cinco de Febrero Santa Agueda todas las fiestas arrebata.

*Cuando Febrero no febrerea Marzo marcea.

*En Febrero ,corre el agua por cualquier reguero.

*En Febrero,día templado,es que viene soplado.

*En Febrero la castaña y el besugo no tienen zumo.

*En Febrero no te quites el sombrero.

*En Febrero sale el oso del osero.

*En Febrero un día malo y otro bueno.

*En Febrero un rato al sol y otro al romero.

*Febrero el corto, el pan de todos.

*Las aguas de Febrero caben con un caldero.

*Quien en Febrero no escarda ¿A qué aguarda?

jueves, 3 de febrero de 2011

Verdad que sería estupendo

Verdad que sería estupendo
que las espadas fueran un palo de la baraja
que el escudo una moneda portuguesa
y un tanque una jarra grande de cerveza.

Verdad que sería estupendo
que las bases fueran el lado de un triángulo, ooooh
que las escuadras sólo reglas de diseño
y los gatillos gatos pequeños.

Que apuntar fuera soplarle la tabla a Manolito
que disparar darle una patada a un balón
y que los "persing" fueran esa marca de rotulador
con los que tu siempre pintas mi corazón.

Verdad que sería estupendo
que las bombas fueran globos de chicle
que las sirenas fueran peces con cuerpo de mujer
y las granadas una clase de fruta

Que alarma fuera un grupo de rock and roll
y que la pólvora fuera para hacer fuegos artificiales
y que los "persing" fueran esa marca de rotulador
con los que tu siempre pintas mi corazón
con los que yo siempre pinto tu corazón.

Y no existiera más arma en el mundo
y no existiera más arma en el mundo
más que el "mi arma" andaluz.

Verdad que sería estupendo.
Verdad que seria estupendo.


http://www.wikio.es/video/complices-verdad-seria-estupendo-montaje-fotografico-2171030

sábado, 15 de enero de 2011

Tres años (y un mes) en nao Cinco naves repetiran 500 años después el viaje alrededor del mundo de Elcano

http://www.elpais.com/articulo/andalucia/anos/mes/nao/elpepiespand/20101202elpand_15/Tes?print=1
E. CABRIA - Sevilla - 02/12/2010

Juan Sebastián Elcano regresó a Sevilla el 8 de septiembre de 1522. Era oficial de la Victoria, quinta embarcación de la flota que capitaneó Fernando de Magallanes para dar la vuelta al globo. La única que volvió, después de tres años y un mes de viaje, a la metrópoli. Transcurridos 500 años, cinco réplicas de las naos originales repetirán aquella gesta, a partir del 9 de agosto de 2019, durante 37 meses.

La Fundación sevillana Nao Victoria anunció ayer que ha iniciado el diseño de los barcos. Pretende ser fiel a la hazaña, pero adaptándose a los tiempos (viajarán mujeres) y a las necesidades tecnológicas (contarán con impulso eléctrico porque está prohibido salir a vela de un puerto). Como entonces, 243 tripulantes de una decena de países recorrerán, siempre a poniente, más de 32.000 millas náuticas, a bordo de la San Antonio, la Trinidad, la Concepción, la Santiago y la Victoria.

Españoles, franceses, portugueses, griegos, italianos y holandeses, entre otros, visitarán los lugares por los que pasaron las naos originales y algunos más. "Hoy no se entendería un viaje así sin pasar por Nueva York o el Río de la Plata. Pero, en el concepto moderno de regiones, fue el primer proyecto europeo de la historia", afirmó ayer Juan Salas, presidente de la fundación.

"Desde Roma no se había hecho ninguna operación en la que se involucrasen tantos territorios", aseguró en un acto para presentar los actos del quinto centenario en el Archivo Central de Indias de Sevilla. La construcción de las naves dependerá de ayudas privadas y, dada la envergadura del proyecto, no se podrá realizar en los astilleros de la capital. Respecto a los apoyos, Salas recalcó que, de momento, "ninguno es andaluz". Misma estética, última generación en ingeniería naval: energía solar, almacenamiento mediante pila de combustible y reciclaje de residuos a bordo.

Salas no adelantó nada del presupuesto porque, en una década, la tecnología va a cambiar mucho", justificó. Tanto que ya espera contar con un sistema de navegación que aún es embrionario: el Galileo, un proyecto por satélite que la Unión Europea quiere implantar en 2014.

Para hacer las réplicas, la Fundación Nao Victoria trabaja en la creación de un centro integral de formación náutica. Un espacio, que rememorará a la antigua Escuela Náutica San Telmo de Sevilla, con escuelas taller y casas de oficio para jóvenes en riesgo de exclusión social. La idea de base, indicó Salas, es recuperar el oficio de carpintero de ribera, tradicional en la Sevilla de hace 500 años, cuando todas las expediciones marítimas salían de la enriquecida capital andaluza.

La fundación ha decidido impulsar el proyecto amparándose en un dato: el periplo de ida y vuelta a la capital andaluza de Elcano solo lo conoce el 5% de los sevillanos, según una encuesta entre los que se acercaron a conocer la réplica de la nao Victoria que se instaló en el puerto de la ciudad, hace dos años. Y eso que de aquella se descubrió el estrecho de Magallanes, los archipiélagos del Pacífico, los husos horarios y que la tierra es redonda.

miércoles, 5 de enero de 2011


Los Reyes Magos según Rubén Darío

http://www.elhuevodechocolate.com/reyes/reyes6.htm
Los Tres Reyes Magos

-Yo soy Gaspar. Aquí traigo el incienso.
Vengo a decir: La vida es pura y bella.
Existe Dios. El amor es inmenso.
¡Todo lo sé por la divina Estrella!

-Yo soy Melchor. Mi mirra aroma todo.
Existe Dios. Él es la luz del día.
La blanca flor tiene sus pies en lodo.
¡Y en el placer hay la melancolía!

-Yo soy Baltasar. Traigo el oro. Aseguro
que existe Dios. Él es el grande y fuerte.
Todo lo sé por el lucero puro
que brilla en la diadema de la Muerte.

-Gaspar, Melchor y Baltasar, callaos.
Triunfa el amor, y a su fiesta os convida.
¡Cristo resurge, hace la luz del caos
y tiene la corona de la Vida!

La rosa niña


(A Mademoiselle Margarita M. Guido)

Cristal, oro y rosa. Alba en Palestina.
Salen los tres reyes de adorar al Rey,
flor de infancia llena de una luz divina
que humaniza y dora la mula y el buey.

Baltasar medita, mirando la estrella
que guía en la altura. Gaspar sueña en
la visión sagrada. Melchor ve, en aquella
visión, la llegada de un mágico bien.

Las cabalgaduras sacuden los cuellos
cubiertos de sedas y metales. Frío
matinal refresca belfos de camellos
húmedos de gracia, de azur y rocío.

Las meditaciones de la barba sabia
van acompasando los plumajes flavos,
los ágiles trotes de potros de Arabia
y las risas blancas de negros esclavos.

¿De dónde vinieron a la Epifanía?
¿De Persia? ¿De Egipto? ¿De la India? Es en vano
cavilar. Vinieron de la luz, del Día,
del Amor. Inútil pensar. Tertuliano.

El fin anunciaban de un gran cautiverio,
y el advenimiento de un raro tesoro.
Traían un símbolo de triple misterio,
portando el incienso, la mirra y el oro.

En las cercanías de Belén se para
el cortejo. ¿A causa? A causa de que
una dulce niña de belleza rara
surge ante los magos, toda ensueño y fe.

- "¡Oh, reyes!" -les dice- "Yo soy una niña
que oyó a los vecinos pastores cantar,
y desde la próxima florida campiña
miró vuestro regio cortejo pasar.

Yo sé que ha nacido Jesús Nazareno,
que el mundo está lleno de gozo por El,
y qué es tan rosado, tan lindo y tan bueno,
que hace al sol más sol, y a la miel más miel.

Aún no llega el día...¿Dónde está el establo?
¡Prestadme la estrella para ir a Belén!
No tengáis cuidado que la apague el diablo
con mis ojos puros la cuidare bien!"

Los magos quedaron silenciosos, bella
de toda belleza, a Belén tornó
la estrella y la niña, llevada por ella
al establo, cuna de Jesús, entró.

La madre miraba a su niño lucero
las dos bestias buenas daban su calor
sonreía el santo y viejo carpintero,
la niña estaba temblando de amor.

Allí había oro en cajas reales,
perfume en frascos de hechura oriental,
incienso en copas de finos metales,
y quesos y flores y miel de panal.

¡Qué dar a ese niño, qué dar sino ella!
¿Qué dar a ese tesoro divino, Señor?
Le hubiera ofrecido la mágica estrella,
la de Baltasar, Gaspar y Melchor.

Mas a los influjos del hada amorosa,
que supo el secreto de aquel corazón,
se fue convirtiendo poco a poco en rosa,
en rosa más bella que las de Sarón.

La metamorfosis fue santa aquel día
(la sombra lejana de Ovidio aplaudía)
Pues la dulce niña ofreció al Señor,
que le agradecía y le sonreía,
en la melodía de la Epifanía,
su cuerpo hecho pétalos y su alma hecha flor...